Uno de los más destacados dirigentes de la historia aprista es, sin ninguna duda, Ramiro Prialé Zevallos. Fue, como lo ha señalado Guelly Villanueva en su libro “Dinámica Aprista” el primer estructurador de la organización partidaria, en los años difíciles de las persecuciones implacables de los dictadores de turno y de las “catacumbas”, de las que alguna vez me habló don Armando Villanueva, en una entrevista que le hiciera.
Y aun cuando ha corrido mucha agua bajo el puente, la organización de un partido político sigue siendo crucial. No solo para quienes militan en él, sino para todos los que creemos en la democracia. Si la debilidad impera en la organización de los partidos políticos, la democracia corre peligro de mantener su vigencia.
Un partido debidamente organizado, tiende a producir liderazgos dinámicos que permitan oxigenar y refrescar la estructura. En esa línea, el caudillaje es impensable. Haya de la Torres, allá por 1933, dijo: “De allí que tienda mis ojos a las muchachas y muchachos del partido. Por eso voy a la juventud, voy buscando en la juventud a los futuros dirigentes del partido. Por eso quiero que la juventud sienta al aprismo como suyo y lo conduzca, lo defienda y lo proyecte en el porvenir, como señuelo victorioso de justicia”.
Esas palabras del fundador del APRA tranquilamente se pueden repicar en todos los partidos políticos. Hay que trabajar con la juventud, pero no para usarla en la campaña como pintores o distribuidores de propaganda. Hay que trabajar con ellos para que formen una filosofía de vida que les permitan tener una doctrina política en la que basar sus acciones.
Veamos ahora qué partido político tiene una debida organización en Lambayeque. Fuerza Popular, ¿sabe alguien dónde queda su lugar partidario y quién es su secretario general? Ni hablar de los comités provinciales y distritales. Alejandro Aguinaga y Héctor Becerril son una especie de Rusia y Turquía. Al primero lo apoya el inquilino de la DINOES. Al segundo, la candidata, que parece no haber preguntado si el actual congresista merece representar a Lambayeque.
En el caso de “Peruanos por el Kambio”, tienen su local en donde antes estuvo Perú Posible. ¿Será de buen agüero? No tienen un secretario general, y solo muestra coordinadores, dos de los cuales tienen pasados políticos en otros partidos y no generan, hasta hoy, empatía con la población. El tercero es un joven que, por el momento, el único pergamino que luce es ser hijo de Cucho Saavedra.
En el APRA, el local de “la plazuela” es conocido: Tienen su dirigencia reconocida y en actividad. Lo malo es que, pesan sobre el secretario general denuncias penales muy graves: No se nota una labor esmerada con los jóvenes pero, sin duda, tienen la maquinaria electoral de mayor experiencia que lo convierte en un adversario de fuste. Si Velásquez participa, las posibilidades de los demás serán limitadas.
APP es en estos momentos una organización, debidamente estructurada. Les guste o no a sus adversarios. Tienen locales en todos los distritos, dirigencia reconocida y varios nombres para ser dirigentes, aunque claro está, mientras César Acuña no ponga coto a la participación familiar, las posibilidades de que surjan nuevos liderazgos será casi nula. Hablar de los demás, por ahora, no es posible, puesto que, sobre ellos cae a pelo eso de “SIN ORGANIZACIÓN NO HAY PARTIDO”
No hay comentarios:
Publicar un comentario