Mi segundo año de media lo hice
en el Glorioso Colegio Nacional de San José. Por razones familiares, mi madre
tomó la decisión de traernos, a mi hermano Coco y a mí, a vivir a Chiclayo. Fue
difícil el cambio, yo había estado estudiando en el también Glorioso Colegio
Nacional Nuestra Señora de Guadalupe, y tenía hecha amistad con muchos de mis
compañeros de plantel y de barrio.
Pronto me di cuenta de lo que era
ser sanjosefino. Mucho pesaba la tradición y el prestigio que años anteriores
había ganado el plantel. El nombre de Karl Weiss me empezó a ser familiar. Yo
estuve allí, teniendo como director al Doctor Eloy Arriola Senisse, un iqueño
que había sido director en otros planteles, en todos los cuales dejó honda
huella de su capacidad profesional y su calidad humana.
El Doctor Arriola dijo una vez: “Soy
Maestro y como tal fui siempre sujeto de órdenes, que traté de cumplir,
explicando que la vida de un buen Maestro es, en muchos casos, como la vida de
un buen soldado es cumplir con su deber, allí donde la Patria demande sus
servicios”. Durante 7 años fue el Director del “San José”. La Promoción 1993
lleva su nombre, como seguramente otras de los planteles en los que fue Director.
El 24 de Setiembre de 1999, se
publica en el diario La Industria un artículo del inolvidable Alfredo José
Delgado Bravo, que tituló “Eternamente San José”, allí se recuerdan algunas
frases de Arriola Senisse, y yo rescato éstas: “La juventud Sanjosefina, noble,
gallarda, generosa. Columna Vertebral de un pueblo. Alma del Coloso del
Norte….el San José de Chiclayo”.
En ese mismo artículo, Delgado Bravo termina diciendo: “Por
todo ello hay una notable identificación de la ciudad con su centenario
colegio, a cuyo paso, en los desfiles de julio y setiembre, vibra la multitud
que lo aclama y vitorea al compás de “San José ayer…San José hoy…San José
eternamente “.
El pasado domingo 27 el “San
José” salió a las calles para participar del desfile, en homenaje a sus 156
años de fundación. Y, salieron, no solo los alumnos, que actualmente ocupan sus
aulas, sino que, los acompañaron cientos de ex sanjosefinos, que se
reencuentran desde todas partes del país y del mundo. Es, sin duda, una fiesta
de la chiclayanidad. El “San José” es parte importante en la historia de
Chiclayo. Por sus aulas han pasado jóvenes que han triunfado en la vida, y que,
cada vez que pueden, los que viven en otros sitios, se vienen a Chiclayo a
participar de la fiesta de su colegio.
Es verdad que en los últimos años,
el cierre de los desfiles es un “rompanfilas” con ingreso a un “zafarrancho de
combate” y los sanjosefinos, convierten la Avenida Balta, sobre todo, aunque este
último domingo, el Parque Principal, 7 de Enero y San José también, en una
especie de “bar a cielo abierto” y el consumo, sobre todo de cerveza, cada año
rompe records. Claro, el problema adicional que se genera, más allá de los
cuerpos doblegados por el alcohol, es que, también las calles las convierten en
“urinarios a cielo abierto”.
Todos los chiclayanos saben que
eso va a pasar. Todos nos molestamos el lunes siguiente, cuando no el mismo
domingo. Pero, ya el martes se nos pasa y comenzamos, los que son o no
sanjosefinos, a reírnos de lo que pasó el domingo. Más del desfile que de los
tragos. Más de los recuerdos vividos con los compañeros, que no se veían hacía
mucho tiempo, que de los malcriados, que como en este aniversario, nadie pudo
controlar.
Sin embargo, nuestro puritano
alcalde no ha tenido mejor idea que enviarle un documento con carácter
conminatorio al Director del San José, dándole plazo de 5 días para que “haga
los descargos pertinentes, explicando en mérito a qué facultad, su persona
autorizó la venta indiscriminada de licor en las calles del centro de la
ciudad”.
Y, no solo eso, Cornejo, que
estudió su primaria en la “Escuela Vocacional 061” de Pucará-Jaén y su
secundaria en el “Colegio Alfonso Villanueva Pinillos” también de Pucará-Jaén,
pretende intimidarlo, diciéndole que: “deberá presentar la relación de la
persona o personas que contrataron, con el despacho de la dirección del
Colegio, la venta de licor”. Termina “el Chinguel” advirtiéndoles que, se iniciaría
un proceso sancionador y que, incluso, se generaría una denuncia penal por la
comisión de varios delitos.
Estoy seguro que Walter Saavedra
Bonilla, el actual director del plantel, asumirá con respeto la comunicación
del Alcalde, pero la tomará como una anécdota. Claro, porque la amenaza que pretende,
¿castigar al Director?, ¿Multar al plantel?....Cómo dice el dicho “Hombre, no
mojen que no hay quién planche”.
Otro consejo Alcalde, el próximo
año tome sus precauciones, porque por más que quiera cambiar el lugar del
desfile sanjosefino, allí donde los mande, el bar estará abierto. Es preferible
que usted disponga que no entre nadie con cajas de cerveza y coordine, COORDINE con las autoridades del
Colegio y de la Región de Educación, para que se tomen medidas preventivas.
Pero, el próximo año Alcalde,
porque, entonces, solo le quedarían dos años más para terminar su
Mandato. Usted se irá, quién sabe,
para nunca más volver, y, mientras tanto, los chiclayanos seguirán gritando:
“SAN JOSÉ AYER….SAN JOSÉ HOY….SAN JOSÉ ETERNAMENTE”.
La clave.- Por si acaso yo soy ex
cadete del Colegio Militar Elías Aguirre.
1 comentario:
cuando llego al colegio el dr. Eloy Arriola Senisse
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