viernes, 14 de noviembre de 2014

¿UN LEÓN EN EL SATCh?

“Admito que me equivoqué al designarlo. Pero no le iba a permitir que contrate a personas con 5,000 soles de sueldo. Le pedí que ejecute la amnistía tributaria y no quiso. Yo creo que abusó de la confianza que le di. Tuvo un comportamiento malsano, prepotente y autoritario”. Una iracunda alcaldesa, respondía así a los periodistas que le preguntaban sobre lo que había pasado en el SATCh. Era la mañana del 16 de octubre pasado, cuando Elizabeth Montenegro daba esas declaraciones sobre Avelino Ponce de León (APdeL), a quien el 13 de octubre, lo había designado como jefe del ente recaudador, a través de la Resolución de Alcaldía No. 854-2014-MPCh/A.

Ese mismo día, aunque en horas de la tarde, respondía Ponce de León: “a mí nadie me maneja con control remoto. Yo no me quedo acá ni un minuto más.  Llevo solo tres días y estoy sorprendido, por todos lados hay irregularidades”. Y, asumiendo una posición clarísima, aunque confrontacional, agregó: “Aquí hay muchos incompetentes y corruptos y yo no voy a permitir que esta gente  crea que me puede manejar a su gusto y antojo”.

Sin embargo, en medio de esas frases fuertes y ofensivas, la alcaldesa firma la Resolución de Alcaldía No. 854/2014-MPCh/A del 16 de octubre del 2014 y, sorprendentemente, en el Artículo Primero de la misma se lee: “dándoles las gracias por los servicios prestados”. Tamaña contradicción nos lleva a preguntarnos: ¿leerá la alcaldesa los documentos antes de firmarlos? Y, en todo caso, teniendo en cuenta las presiones a las que está sometida, ¿no hay alguna persona que actúe como filtro y evite que este tipo de contradicciones se dé?

APdeL es una persona de vasta experiencia en la administración pública.  Casi 30 años de trabajo, avalan su experiencia y conocimiento en este sector. Él creó el SATCh, con el apoyo del exalcalde Castillo, en una de las pocas acciones que le reconozco como positiva. Y ha sido en los últimos tiempos un cuestionador permanente sobre el manejo que los designados por Torres Gonzáles hacían en el SATCh. “En el 2004 éramos 65 personas, hoy son 120 las personas que trabajan allí. Para cambiar la imagen y recuperar la confianza de los contribuyentes, tenía que empezar poniendo orden en casa”, manifestó.

Pero para hacer eso, era necesario contratar a 5 personas con un sueldo de 4 mil soles. “Yo solo lleve a dos, un abogado de mi confianza que me asegurara que, lo que fuese a firmar, estuviera dentro de lo correcto y lo legal. El gerente legal que encontré, tenía tres trabajadores a su lado, sin embargo, habían dos asesores externos que manejaban 180 expedientes y cobraban 3,500 soles mensuales”. Y, claro, también quiso tener la seguridad en la administración de la institución, pero la respuesta de EMD fue rápida y violenta. Le retiró la confianza.

“La ignorancia y el desconocimiento son atrevidos. Qué le puedo responder a una persona ignorante. Simplemente no encajo y punto”. Ponce de León señala que, a la alcaldesa no le interesaba desembarazarse de los corruptos que hay en el SATCh: “desde el segundo día que empecé a trabajar, empezó a fregarme. Lo único que le interesaba era cuánto estábamos cobrando y por qué no aplicaba una ordenanza de beneficios tributarios. Me di cuenta que estaba totalmente desubicada. Hoy tengo la impresión que tenía temor que fuera a descubrir algo que la pudiera comprometer”.

Trabajar en un ambiente de desconfianza y con una carga jerárquica incesante debe ser terrible: “yo estaba trabajando en el lodo, en arenas movedizas. ¿Cómo se puede pensar que iba a confiar en el abogado, o en el administrador, sabiendo que han formado parte de una administración con varios casos severos de  irregularidades?”. Y, entonces, comenzó a citar a algunos de esos casos.

El 15 de abril del 2014, con Comprobante No. 2014000750, se le paga 2,500 nuevos soles a la empresa Servicio Ingeniería y Mantenimiento SRL por “Consultoría para la realización de los requerimientos técnicos para la compra del auto, para el sorteo SATCh.” Es decir, se pagó esa cifra para que alguien dijera: “sí, ése es el carro que se debe comprar” y luego se pagaron 32,400 soles para la adquisición de un auto modelo Chery. Increíble  pero cierto.

Pero, lo que a continuación nos hizo conocer, es de Ripley. Desde sus inicios en el SATCh, se tenía el objetivo de construir el local propio. El 27 de noviembre del 2008, con comprobante No. 2008003362, se le pagó a Jorge Antonio Ulloque Rodríguez la suma de 22,750 nuevos soles, por la “Elaboración de Expediente Técnico para construcción del local del SATCh”. El 26 de junio del 2009, por el mismo concepto y al mismo ciudadano, se le pagó mediante el comprobante No. 2009001963, la suma de 29,250 soles.

El  asunto no acaba allí, porque, casi un año después, el cuatro de junio del 2010, con comprobante No. 2010001530, se le paga a Jorge Antonio Ulloque Rodríguez, la suma de 14,078.72 nuevos soles, por la “LIQUIDACIÓN  EXTRAJUDICIAL POR CONSULTORÍA PARA ELABORACIÓN DE EXP.TÉCNICO PARA CONSTRUCCIÓN DE LOCAL”.  El uno de abril del 2011, con el comprobante No. 2011000915, se le pagó a Manuel Antonio Cruz Dávila la suma de 5,000 nuevos soles, por la “ACTUALIZACIÓN DE EXP.TÉCNICO DE CONSTRUCCIÓN E IMPLEMETACIÓN DE LOCAL” (Autorizado por la Jefatura)

 Luego, el 19 de septiembre del 2013, con comprobante No.2013001907, se le paga a Edwin Asunción Bacilo Maco, la suma de 8,500 nuevos soles, por la “ACTUALIZACIÓN DE ESTUDIO DE PREINVERSIÓN DEL PROYECTO DE CONSTRUCCIÓN E IMPLEMENTACIÓN DEL LOCAL”. Y, dos meses después, el 07 de noviembre del 2013, con comprobante No.2013002312, se le paga a la Corporación Portilla SAC, la suma de 8,190 nuevos soles, por la “ACTUALIZACIÓN  DEL EXP.TÉCNICO PARA EL PROYECTO DE CONSTRUCCIÓN E IMPLEMENTACIÓN DEL LOCAL DEL SATCh”.

Casi 90 mil soles gastados en papeles, porque como todos sabemos, hasta hoy el local propio del SATCh, sigue siendo solo un sueño. El asunto es que, con el conocimiento de estos pagos, alguien debería averiguar el porqué se hicieron. ¿Qué necesidad urgente tuvieron para efectuarles? O es que, como se especula, ¿eran para satisfacer exigencias provenientes del municipio? Ponce de León quiso averiguar y Montenegro Dávila, lo echó. Extraño, ¿verdad?
Y, en el tema laboral, APdeL averiguó datos muy interesantes. El servidor Carlos Aguilar Calderón, jefe de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto, con contrato a plazo indeterminado desde el 22 de noviembre del 2004, tiene licencia sin goce de haber desde el tres de junio del 2013 al 31 de diciembre del 2015. Labora en la Unidad Ejecutora Naylamp.No.005.

Eduardo Riojas Ramírez, es un periodista profesional, titular de la Oficina de Imagen Institucional, contratado a plazo indeterminado desde el uno de enero del 2008, sin embargo, lo mandaron a trabajar como encargado del Programa Fomento de la Cultura Tributaria. Y, para reemplazarlo, colocaron al periodista que denunció el uso indebido de la camioneta de alcaldía. Sí, ese mismo que durante semanas mantuvo su denuncia en el medio que laboraba. Llegado el juicio, cambió su versión y dijo que no estaba seguro, que no podía afirmar, que el diario le daba una cámara fotográfica vieja, que no tomaba buenas fotos.

 Mil disculpas daba para negar sus afirmaciones y luego recibir un contrato en el SATCh. Se apellida Saucedo y estuvo hace poco involucrado con el jefe de Imagen de la MPCh, en un tema de extorsión telefónica a un Arq. Ramírez, también funcionario municipal. Con total desparpajo dijo: “sí es mi teléfono. Tengo varios y se lo presté a mi amigo Carlos Santa Cruz, ¿cuál es el problema?”. Saucedo tenía un contrato a plazo fijo desde el dos de enero del 2014 al uno de noviembre del 2014. ¿Se lo habrán renovado?

Con este tipo de persona, quería Montenegro que Ponce de León trabajase.  O, ¿acaso sería que le causaba una reacción neurótica que siguiera escarbando? y que, como dijera Cristian Polanco en la página de Facebook  de Chiclayano Despierta: “Lo botan porque la Montenegro tiene miedo que Ponce de León le encuentre sus jugadas que hizo cuando esta señora reemplazo a Beto en la primera gestión interina. Como cuando le condonó la deuda en el SATCh a Toñitos Night Vip, con el lobby de una regidora que es asidua concurrente a ese antro”.

El asunto es que, la desconfianza que los contribuyentes tienen con la actual gestión es indiscutible, por eso es que muchos ya se preguntan si: ¿acaso necesitamos tener “UN LEÓN EN EL SATCh”?

No hay comentarios: